Ya son cuatro las personas que murieron durante la violencia que se desató en distintos distritos del país a raíz de la protesta de policías en reclamo de mejoras salariales. Anoche, la violencia se apoderó de la capital jujeña, del Gran San Miguel de Tucumán y de varias localidades chaqueñas. Fuentes policiales denunciaron además otros tres fallecidos en esas provincias, pero no fueron confirmados.
En Jujuy se registró el primer muerto -un joven de 15 años apuñalado- y graves heridos como consecuencia de distintos saqueos. Finalmente, a la medianoche, los efectivos que se manifestaban avalaron la oferta que hizo el gobernador y levantaron la protesta.
Chaco fue otra de las jurisdicciones que tuvo que lamentar también un muerto a causa de los ataques violentos a supermercados y comercios. Un joven falleció por un impacto de bala y un subcomisario que había resultado herido, al intentar evitar un saqueo, falleció esta mañana por las heridas que sufrió. Al menos otra persona resultó herida y se encuentra en grave estado.
El director del Hospital Julio C. Perrando de Resistencia, Cristian Obregón, confirmó que un hombre falleció al momento de ingresar al centro asistencial debido a un impacto de arma de fuego que habría recibido durante los saqueos registrados en un comercio ubicado en la capital provincial.
El directivo señaló que la víctima habría participado de un asalto a un local situado sobre la avenida Castelli y calle 15, de Resistencia, e ingresó ya sin vida al centro asistencial, tras ser socorrido en la vía pública por una ambulancia.
Algunos medios locales, incluso Obregón, señalaron que también hubo otras tres víctimas fatales, aunque esos casos no fueron confirmados oficialmente.
En la capital de Tucumán también hubo una ola de saqueos violentos luego de una protesta de policías frente a la Subjefatura, que pide un mínimo de $12.000, similar al que obtuvieron sus colegas en Córdoba. Esta madrugada, falló el intento de la provincia de acordar con los agentes, que rechazaron una suba del 35% y siguen con las medidas de fuerza.
La mayoría de los comerciantes tucumanos afectados repelió los saqueos a los tiros. El saldo de los desmanes dejó 30 heridos de bala, cuatro en grave estado. Además, policías denunciaron a la prensa un muerto, pero tampoco pudo ser confirmado oficialmente.
En Entre Ríos, la situación también fue compleja. Policías retirados y en actividad, junto a sus familiares, encabezaron un reclamo en Paraná, Gualeguaychú y Concordia, y en esta última se registraron saqueos y hechos de violencia que dejaron como saldo un muerto y 40 heridos.
El gobernador Sergio Urribarri ofreció $8.500 y los efectivos primero anunciaron que aceptaban el acuerdo, pero a la media hora dieron marcha atrás al considerar que el ofrecimiento no llenaba sus expectativas. Finalmente, tras una segunda reunión con las autoridades provinciales, firmaron un acta acuerdo al filo de la noche y garantizaron retomar sus tareas.
En Santa Fe, la protesta se extendió a las 19 unidades regionales -había arrancado con las dos de Rosario-, que abarcan un total de 18.000 uniformados que se niegan a recibir órdenes de sus jefes.
Antonio Bonfatti ofreció un sueldo básico de $8.100 pesos a partir de enero para los policías que recién arrancan en el escalafón y se aguardaba la respuesta policial. Hoy habrá una nueva audiencia entre las autoridades provinciales y representantes de los efectivos que protestan.
En Corrientes, agentes de franco, policías retirados y familiares realizaron una protesta en la sede del Comando de Patrullas de esa provincia, sin acuerdo hasta el momento.
En la ciudad chubutense de Puerto Madryn, los policías se acuartelaron en el comando radioeléctrico, pese a que el fin de semana se había anunciado un incremento escalonado para la fuerza.
El comisario mayor Hugo Herrera, jefe de la Unidad Regional de Puerto Madryn, afirmó que "desde las 7 se declaró la medida de fuerza, por lo que todas las seccionales están sin agentes, que se movilizaron al comando radioeléctrico".
En San Luis, un grupo de policías retirados y sus familiares se sumaron a los reclamos salariales frente al edificio central de la fuerza puntana y amenazaron con sumar a la protesta al personal en actividad.
En La Pampa un grupo de policías anunció ayer que marchará, junto con sus familias, el miércoles 18 en reclamo de aumentos salariales y mejoras en las condiciones laborales, pero descartaron que vayan a autoacuartelarse.
Los agentes pidieron un aumento de salarios y que el básico pase de 1.500 pesos a 3.000, a la vez que pusieron como fecha tope de negociación el miércoles 18 de diciembre, ya que de no llegar a un acuerdo se realizará una movilización en el centro de la capital.
La medida de protesta se dio a conocer a través de un escrito que un dirigente barrial hizo llegar a la prensa, ya que los policías temen represalias de sus superiores.
En tanto, el gobierno de Misiones dispuso un aumento del 35% para la policía de esa provincia, luego de mantener negociaciones con los efectivos de la fuerza, que amenazaban con abandonar los servicios y acuartelarse a partir de anoche.
Por estos hechos, el Gobierno denunció maniobras desestabilizadoras y afirmó que "lossaqueos son organizados". El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, remarcó que la Casa Rosada está "consternada por estas acciones deliberadas de grupos que pretenden generar caos y zozobra".
En Buenos Aires, un sector de la Policía continuaba con las deliberaciones para ver si levantaba la medida, luego del aumento dispuesto por decreto por el gobernador Daniel Scioli, que elevó el sueldo mínimo de bolsillo a 8.570 pesos, y que en enero pasará a los 9.000 pesos.
Más allá de la postura radical de "un grupo minoritario", que reclama $12.000, hubo una importante cantidad de efectivos que aceptaron en principio el acuerdo, según aseguró anoche Scioli, en declaraciones televisivas.
La protesta se había iniciado el domingo en La Plata, con familiares e integrantes de la Guardia de Infantería y Caballería que estaban en franco de servicio, aunque luego se sumaron efectivos de Mar del Plata y del Conurbano, en 14 comisarías.
Justamente, ante el acuartelamiento en la ciudad balnearia se registraron algunos violentos saqueos y daños a comercios, por lo que el intendente, Gustavo Pulti, recomendó a los comerciantes no abrir las puertas de sus locales ayer hasta tanto se normalice la presencia policial. Hoy no habrá clases durante la mañana.
En la Ciudad de Buenos Aires, si bien no había medidas de fuerza policial, los comerciantes de distintos puntos de la Capital trabajaron con las persianas bajas y se reforzó la presencia de efectivos en las calles y en las cercanías de los supermercados y centros comerciales.
fUENTE INFOBAE.COM
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