viernes, 10 de abril de 2015

MALVINAS- PAGINA12 - LA NACION

Cita y denuncia por la soberanía de las islas

Se presentó ante la Procelac la denuncia penal contra empresas que buscan petróleo en las islas y sus alrededores. Además, el embajador Freeman fue citado para dar “explicaciones” sobre el caso de espionaje y la creciente militarización del archipiélago.

El gobierno nacional presentó ayer una denuncia penal contra las empresas petroleras que se encuentran realizando tareas de exploración en las Islas Malvinas y sus alrededores. “No podemos permitir que se lleven las riquezas del territorio argentino y que son recursos pertenecientes a los 40 millones de argentinos. Estas empresas van a tener que responder ante la Justicia argentina”, aseguró el secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, luego de hacer la presentación judicial junto a la secretaria de Energía, Mariana Matranga, ante la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), que encabeza el fiscal Carlos Gonella. Se sumó además la citación del embajador inglés, John Freeman, para que dé “explicaciones” sobre acciones de espionaje contra la Argentina y por la “militarización y exploración ilegal de hidrocarburos”, se informó en Cancillería, en respuesta además a la citación de la Oficina de Relaciones Exteriores inglesa a la embajadora argentina en Londres, Alicia Castro.
“Queremos que los dueños de las empresas sean juzgados de acuerdo con las leyes argentinas y el derecho internacional”, señaló Filmus al explicar el alcance de la denuncia presentada ante la Procelac y agregó que el proceso “puede terminar con un pedido de captura por parte de jueces argentinos a quienes operan ilegalmente en el mar Argentino”. La presentación se formalizó ayer luego de que la anunciara el propio Filmus el 2 de abril, al cumplirse el 33 aniversario del inicio de la guerra por la soberanía argentina sobre las Islas Malvinas. “Esta denuncia está siendo acompañada con el apoyo que tiene a nivel de los organismos multilaterales, por numerosas declaraciones que le dan a la Argentina el derecho para hacer este reclamo y defender los recursos de los cuarenta millones de argentinos”, sostuvo el funcionario, resaltando el respaldo continental con el que cuenta el reclamo argentino.
La tensión en la relación bilateral con el Reino Unido viene en ascenso a partir de la estrategia propuesta por el gobierno conservador de David Cameron. A pesar del persistente llamado al diálogo que desplegó el gobierno nacional desde hace más de diez años, los ingleses respondieron siempre redoblando la apuesta. El último escalón fue el anuncio, el 2 de abril, del inicio de una nueva exploración en los alrededores de las Islas Malvinas, al norte, que se unió a la denuncia del espía estadounidense refugiado en Rusia, Edward Snowden, de una campaña de los servicios de Inteligencia británicos para realizar “acciones de espionaje electrónico masivo” contra la Argentina que motivó la cita del embajador inglés en el país para que diera las explicaciones del caso y para expresar el “malestar” del Casa Rosada por la convocatoria del Foreign Office (la Cancillería británica) a la embajadora Alicia Castro por las declaraciones de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en el acto que se desarrolló en Ushuaia.

Denuncia por petróleo

La presentación ante la Procelac fue realizada contra los directores y dueños de las empresas que se encuentran explorando en territorio malvinense y sus alrededores. Así, quienes representen a las empresas Rockhopper Exploration plc, Premier Oil plc, Falkland Oil and Gas Limited, Noble Energy Inc. y Edison International SpA son objeto de la denuncia penal. Las compañías integran un consorcio responsable de la contratación de una plataforma semisumergible, que el 6 de marzo inició una campaña exploratoria en la cuenca Malvinas Norte, a unos 200 kilómetros de las islas, en donde prevén perforar al menos seis pozos. El documento acusatorio presentado por Filmus está centrado en la modificación de la Ley de Hidrocarburos realizada en el 2013. Así, se aplicará por primera vez el texto reformado que prevé prisión y multas para los directivos de las compañías implicadas en la exploración y explotación de hidrocarburos. “No podemos permitir que se lleven las riquezas del territorio argentino y que son recursos pertenecientes a los cuarenta millones de argentinos. Estas empresas van a tener que responder ante la Justicia argentina”, sostuvo Filmus al presentar el escrito junto a Matranga. Las empresas denunciadas fueron inhabilitadas además por la Secretaría de Energía para operar en el territorio nacional. “Vamos recopilando las pruebas y cuando se demuestra la operación clandestina las inhabilitamos. Estas empresas ya han sido debidamente declaradas ilícitas y han sido inhabilitadas para operar en el territorio nacional por un período de entre 15 y 20 años”, explicó la funcionaria del área.

Cita en Cancillería

El Ministerio de Relaciones Exteriores citó al embajador inglés, John Freeman, para que diera explicaciones sobre el espionaje denunciado por el ex topo de la CIA Edward Snowden y por el anuncio de “aumento del presupuesto en gasto militar” en las islas así como “la introducción del nuevo equipamiento bélico”, informado el 24 de marzo con la excusa de una supuesta “amenaza” argentina por una posible “alianza con Rusia”. La Presidenta hizo mención al tema el 2 de abril, en el acto en conmemoración de los ex combatientes y caídos en Malvinas, en el que señaló dirigiéndose al gobierno británico que “no se preocupen, que no pongan una sola libra más en la defensa de Malvinas, que las pongan en alimentar ingleses, en darles trabajo, educación a los ingleses. No somos un peligro para nadie, no solamente para los ingleses. No somos un peligro en términos militares, de ofensiva militar”, a la vez que calificó como “una provocación” el anuncio del trabajo de las petroleras en las islas ese mismo día.
Apenas una semana después del 33° aniversario de la Guerra de Malvinas, la cartera de Relaciones Exteriores británica había convocado a la embajadora Alicia Castro para que diera explicaciones por las declaraciones presidenciales. Por ello, Freeman fue notificado del “malestar” del Gobierno tras el llamado a Castro, así como también para informar sobre la denuncia contra las empresas de exploración hidrocarburífera y sobre “el silencio del gobierno británico frente a revelaciones de Edward Snowden, a través del medio The Intercept, sobre acciones de espionaje electrónico masivo dirigidas contra la Argentina”, informaron en el ministerio argentino que conduce Héctor Timerman. El vicecanciller Eduardo Zuain señaló en un comunicado que “las acciones (de espionaje) fueron llevadas adelante ante la creciente presión internacional para resolver la disputa de soberanía sobre las Malvinas”.

“Usan Malvinas como Thatcher”

En diálogo con Página/12, el secretario de Asuntos Relativos a las Malvinas atribuyó la nueva escalada por las islas a la necesidad del gobierno británico de buscar votos por derecha de cara a las elecciones generales de mayo.
 Por Laura Vales
El jueves 2 de abril, cuando se cumplían 33 años del inicio de la Guerra de Malvinas, tres petroleras británicas –Premier Oil, Falkland Oil & Gas y Rockhopper– anunciaron el hallazgo de yacimientos de gas y petróleo en la zona aledaña a las islas, que pretenden comenzar a explotar. El secretario de Asuntos Relativos a las Islas Malvinas, Daniel Filmus, explicó en qué consiste la denuncia judicial presentada ayer por el gobierno nacional contra esas empresas –que incluye además a otras dos petroleras de capitales italianos, franceses y americanos–. Se trata de la primera demanda de carácter penal contra compañías petroleras privadas y sus directivos.
Filmus también habló con Página/12 del cruce de convocatorias a los embajadores John Freeman y Alicia Castro y atribuyó la nueva escalada por las Islas Malvinas a la necesidad del gobierno conservador británico, cuyo liderazgo está amenazado por el avance de los laboristas, de ganar votos por derecha para las elecciones generales del próximo 7 de mayo. “Como lo hizo (en 1982 la entonces mandataria Margaret) Thatcher, el primer ministro, David Cameron, utiliza Malvinas para cuestiones de política interna”, sostiene el funcionario.
–¿A quiénes apunta la denuncia presentada por el gobierno nacional y, puntualmente, por qué delitos?
–A cinco empresas petroleras y sus directivos, por el delito de explorar o explotar hidrocarburos en el mar Argentino sin autorización de la Secretaría de Energía nacional.
–La demanda fue llevada a la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac). ¿En qué tribunales va a tramitar?
–En el juzgado federal de Río Grande, por la jurisdicción que tiene la provincia de Tierra del Fuego sobre el territorio de las Malvinas.
–Además de las petroleras, ¿la presentación incluye de alguna forma al gobierno británico?
–No, solamente a las empresas y a sus directivos, porque son las compañías privadas las que están realizando las acciones de exploración y explotación.
–¿Por qué ésta es la primera denuncia de carácter penal?
–Porque antes el delito no estaba tipificado. La ley que regula las condiciones para la exploración y explotación de hidrocarburos en la plataforma continental fue modificada y reglamentada a principios de 2014. Antes, sólo se podía hacer una demanda administrativa, pero a partir de la modificación de la ley se puede avanzar en lo penal contra las empresas que exploren o exploten hidrocarburos en el mar Argentino sin la autorización de la Secretaría de Energía. Después de la modificación de la ley aparecieron esta plataforma y estas cinco empresas. A todas les advertimos el 2 de abril que las íbamos a denunciar. Convocamos incluso al embajador británico para anticiparle la medida, y a los embajadores de los otros países a los que pertenecen las otras empresas, ya que hay tres británicas, otra italiana con capitales franceses y otra americana.
–En años anteriores hubo denuncias contra las petroleras ante organizaciones internacionales, ¿qué resultados tuvieron?
–Hubo presentaciones ante el Mercosur, la Unasur, la Celac, la Organización Latinoamericana de Energía (Olade) y el Grupo de los 77 más China. Esos organismos no sólo aceptaron las denuncias, sino que sacaron resoluciones avalando la legitimidad argentina para formularlas.
–Junto con los anuncios sobre el hallazgo de petróleo y gas, se dio la escalada en las relaciones diplomáticas, con las convocatorias cruzadas a los embajadores.
–En este caso no se comprende la convocatoria a nuestra embajadora (Alicia Castro), porque ella fue convocada por las críticas que hizo Argentina al armamentismo británico... Lo que está mal no es criticar el armamentismo británico, sino el armamentismo británico en sí.
–En este marco, ¿le han dado alguna instrucción a la embajadora?
–Los cuestionamientos a las declaraciones de nuestra Presidenta respecto del armamentismo británico y la decisión del ministro de Defensa británico, Michael Fallon, de decir que la Argentina es una “viva amenaza” a las islas por supuesto fueron respondidas por la Argentina. Por eso, nosotros convocamos a su vez al embajador (Johm Freeman) porque del lado británico hay actitudes, hechos: explorar y explotar los hidrocarburos en el mar Argentino sin autorización, aumentar el presupuesto armamentístico destinado a las islas. Malvinas es el lugar más militarizado del mundo: hay prácticamente un soldado cada dos habitantes. Pero, como dijo la Presidenta, la militarización de las islas no tiene ningún sentido porque Argentina, desde la recuperación de la democracia en 1983, año tras año viene señalando que el único camino que tiene para la recuperación del ejercicio de la soberanía es la paz, es la diplomacia y el diálogo.
–También en estos días se conoció que el Reino Unido habría espiado a la Argentina, según los archivos del ex agente de la CIA Edward Snowden. ¿El gobierno nacional tenía sospechas de que esto ocurría?
–La Argentina lo único que puede decir es que aparecieron estos documentos y que espera que el Reino Unido dé explicaciones.
–Esta escalada es un clásico en cada aniversario de la Guerra de Malvinas, pero el Gobierno viene planteando que esta vez la embestida tiene una explicación electoral.
–Es una escalada que empezó claramente en el Reino Unido. Como planteó la Presidenta, creemos que tiene que ver con la preocupación del primer ministro, David Cameron, de ganar votos por derecha, utilizando Malvinas para cuestiones de política interna, como hizo Margaret Thatcher. La intención es captar el voto por derecha, agitando el espíritu colonialista de un sector de la población.
fUENTE PAGINA12

Alicia Castro, sobre su citación en Londres: "Al funcionario le pregunté si esto era humor británico o una paradoja política"

La embajadora argentina en Gran Bretaña defendió al Gobierno; en Buenos Aires pidieron explicaciones al representante inglés y denunciaron penalmente a empresas por la exploración de hidrocarburos en las islas
En medio de la tensión diplomática entre la Argentina y Gran Bretaña por las islas Malvinas, la embajadora en Londres, Alicia Castro, se quejó por haber sido citada anteayer en el Ministerio de Exteriores británico (Foreign & Commonwealth Office).
"Al funcionario británico le pregunté si esto era humor británico o si era una paradoja política", ironizó esta mañana Castro, tras su reunión con el secretario de la Cancillería inglesa, Simon Fraser . "No se puede creer que nos recriminen a nosotros, como si fuésemos aún una colonia", se quejó la diplomática en intervenciones radiales.
Londres citó a la embajadora argentina Castro para que diera explicaciones sobre los dichos deCristina Kirchner en la conmemoración de los 33 años del inicio de la guerra de Malvinas.
En Ushuaia, la jefa de Estado había denunciado que el aumento de la defensa británica en las islas obedecía tanto a una postura favorable al "lobby armamentista" como a cuestiones de política interna de Londres, en especial por las elecciones que habrá en mayo próximo, cuando se definirá el futuro del primer ministro David Cameron .
"Me dijeron que lamentaban que Cristina anunciara el aumento de la militarización y me dijo que estaban «sorprendidos» por sus dichos. El funcionario me mencionó que esto ocurrió «especialmente en época de elecciones»", dijo Castro en diálogo con las radios Vorterix y Del Plata.
Ayer, horas después de que se conociera la citación de Castro, el vicecanciller argentino Eduardo Zuain decidió convocar al embajador británico, John Freeman, para exigirle explicaciones por el silencio de Londres frente a las revelaciones del ex agente de la CIAEdward Snowden , a través de la publicación The Intercept, sobre acciones de espionaje electrónico masivo dirigidas contra la Argentina. Desde que se conoció esa denuncia, el viernes pasado, Gran Bretaña mantuvo un sugestivo silencio.
Además, la Argentina presentó una denuncia penal contra las empresas británicas Rockhopper Exploration, Premier Oil y Falkland Oil And Gas Limited, que llevan adelante trabajos de exploración de petróleo en la zona de Malvinas .
"El gobierno conservador quiere agitar el fantasma de la guerra de 1982 y quiera levantar la figura de Margaret Thatcher para la elección de ahora. Se puede pensar que hay una especulación de tipo electoral, de otro modo sería absurdo", agregó Castro.
"La Argentina no constituye una amenaza bélica", subrayó la embajadora. "Esa fue una decisión de una dictadura militar con el objetivo de seguir en el poder. El Reino Unido se niega a dialogar con la Argentina, es como si se hubiese negado a dialogar con el canciller alemán luego del nazismo", graficó.
Fuente lanacion.com



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